Descansar
en la Obra Terminada de Cristo es un proceso de aprendizaje. La raza humana
encuentra extremadamente difícil confiar en alguien o algo más. Tal vez sea el
efecto de la caída, donde perdimos la conciencia de Dios y ganamos la
conciencia de nosotros mismos. Tal vez sea la evidencia del orgullo de la vida
que existe en cada uno de nosotros. Somos tan auto suficientes, obstinados y
lentos para creer en lo que nos han ofrecido en Cristo. Cuando se trata de nuestra
redención, el Orden Prescrita de Dios nos llama a descansar en la Obra
Terminada de Cristo. Es decir, debemos sentarnos, depender de algo que alguien
más ha hecho. Nuestras vidas diarias deben seguir este mismo patrón de
confianza y descanso. Cuando Dios terminó la creación descansó de su Obra
Creadora porque no había nada más que hacer. Cuando Jesús llevó a cabo nuestra
salvación en el Calvario, ascendió a la diestra del Padre y se sentó. Y hoy, al
mirar al encuentro de nuestras necesidades personales, debemos entrar en el
resto de la confianza. Mientras descansamos y confiamos, Dios nos conduce a la
plenitud de nuestra herencia. ¡Aprenda a descansar, el trabajo ya está hecho!
Génesis
2: 2
"Y
al séptimo día Dios puso fin a su obra que había hecho; Y descansó en el
séptimo día de toda su obra que había hecho."
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