·
Quizás lo que te
guía en estos momentos sea un problema, un plazo para cancelar una deuda, una
situación sentimental o una exigencia, sea cual sea tu circunstancia puede que
seas guiado por un mal recuerdo, un temor constante o una costumbre
involuntaria. Hay cientos de circunstancias, razones y sentimientos que guían
tu vida. A muchos los guía la culpa. Se pasan toda la vida huyendo de sus
errores y ocultando su vergüenza. Quienes cargan culpas son controlados por sus
recuerdos. Cuando Caín pecó, su culpa lo separó de la presencia de Dios, y el
Señor le dijo en Génesis 4:12 “…en el mundo serás un fugitivo errante”. Eso
describe hoy a la mayoría de la gente van por la vida sin propósito alguno. El
resentimiento siempre te daña más a ti que a la persona con la que estás
resentido. Mientras la persona que te ofendió quizás olvide la ofensa y siga su
vida, tú continúas hirviendo de dolor, perpetuando el pasado. El propósito de
Dios no está sujeto a tu pasado. Él, que convirtió a un asesino llamado Moisés
en un líder y a un cobarde llamado Gedeón en un héroe valiente, también puede
hacer cosas increíbles con lo que te queda de vida. Dios es experto en dar
borrón y cuenta nueva. Salmos 32:35 Feliz el hombre a quien sus culpas y
pecados le han sido perdonados por completo. Yo te digo hoy, que los que te
hicieron daño en el pasado no pueden seguir haciéndotelo a menos que te aferres
al dolor por medio del resentimiento. Lo pasado, pasado está. Te estás haciendo
daño a ti mismo. Por tu propio bien, aprende de todo eso y libérate, suéltalo
ya!, entrégale eso a Dios y empieza a vivir la vida de otra manera, a la manera
de Cristo. Mejor dicho, te estás perdiendo de las maravillas que tiene Dios
para ti si sigues encerrado en esa cueva de amargura y resentimiento…ponte pilas
que la vida es una sola y hay que vivirla alegre, feliz, contento porque tienes
un Dios vivo quien está esperándote para dártelo todo, Él es tu verdadero Guía.
0 comentarios:
Publicar un comentario